Los árbitros del básquetbol en la historia

En la historia del básquetbol han pasado muchos árbitros, pero rescatamos de la historia a cuatro jueces que dirigeron en el Chaco y a nivel nacional. Está claro que no es una tarea fácil, hay que tener responsabilidad y conocimiento. Hoy nuestro recuerdo es para Antonio Tomás Forte, Gerónimo Torterola, Ramóbn Torres y Angel Chaquírez

ARBITRO DE BÁSQUET

Ser árbitro de baloncesto significa ser la autoridad máxima en la cancha, responsable de hacer cumplir las reglas para garantizar un juego justo y seguro. Esto implica tomar decisiones rápidas sobre infracciones y faltas, comunicar las señalizaciones con claridad a jugadores y entrenadores, y mantener la calma y la imparcialidad en un entorno de alta presión y velocidad.

Angel Delovo, Optaciono Escobar (Pte ABR) y Jerónimo Torterola y Antonio Tomás Forte

Funciones principales:

Hacer cumplir las reglas:

Determinar cuándo ocurren infracciones (como empujar, bloquear o doble bote) y sancionarlas correctamente.
Tomar decisiones:

Evaluar continuamente el juego, que está lleno de situaciones rápidas y complejas, para tomar cientos de decisiones en cada partido.
Comunicarse:

Comunicar las decisiones a jugadores y entrenadores, informando sobre la falta cometida y la sanción correspondiente (tiros libres, saque, etc.).
Mantener el control del partido:

Administrar el flujo del juego, detenerlo cuando sea necesario y señalar la dirección del saque o la concesión de tiros libres.

Imparcialidad y calma:

Es fundamental mantener la serenidad y ser objetivo para no generar más desorden y ganarse la confianza de los jugadores.
Rapidez de reacción:

Poder tomar decisiones rápidas en fracciones de segundo, sin ser precipitado.
Concentración:

Ignorar distracciones como los gritos de la multitud, críticas verbales de jugadores o entrenadores, y concentrarse en el juego.
Conocimiento del reglamento:

Entender a fondo las reglas y sus actualizaciones, así como tener el criterio para interpretarlas.
Trabajo en equipo:

Colaborar con otros oficiales (árbitros de mesa, cronometradores) para asegurar la precisión y consistencia en todas las decisiones.